
Liga Animalista de San Diego: Nuestro propósito es que los animales tengan un hogar feliz.
noviembre 9, 2021La Liga Animalista de San Diego funciona desde mayo del presente año y cuenta con 5 protectores y dos ayudantes, quienes se dedican a rescatar, alimentar, esterilizar y encontrar un hogar a todos los animales que están desamparados en las calles.
Glei Hernández
El municipio San Diego se caracteriza por ser una pequeña metrópolis de emprendimiento y rodeada por una abundante belleza ecológica. Pero lo que muchos desconocen, es que la comunidad sandiegana tienen un profundo amor por la naturaliza y los animales.

María Angélica con Guss
Es usual contemplar en cada esquina o en un parque a una familia con una mascota, incluso dentro del municipio existen locales y sitos que se dedican exclusivamente al bienestar de los animales y es que esta comunidad vive para adorar cada segundo a sus compañeros de vida.
Tal es el caso de María Angélica Amanaú, una joven estudiante de medicina veterinaria de 24 años, quien reside en el municipio e inició junto a su familia y vecinos “La Liga Animalista de San Diego” la cual se dedica rescatar a los animales que están en situación de calle y abandono.
La Liga Animalista de San Diego funciona desde mayo del presente año y cuenta con 5 protectores y dos ayudantes, quienes se dedican a rescatar, alimentar, esterilizar y encontrar un hogar a todos los animales que están desamparados en las calles.
“Nuestro principal propósito es asegurar el bienestar de los animales que están a nuestro cargo, ya que cuando los rescatamos se procede a castrarlos y esterilizarlos, para que sea posible reubicarlos en un hogar temporal donde se eduquen y se recuperen tanto físicamente como mentalmente, y así puedan ser adoptados”, señaló Amanaú.
La joven protectora de los derechos de los animales recordó que los miembros de la Liga venían realizando estas labores de manera individual, pero a mediados de abril se toparon con el caso de una perra embrazada que deambulaba por los sectores de Macomaco por lo que todos vecinos procedieron a su búsqueda.
“Quizás fue el destino, pero ese día nos conocimos y desde ese momento formamos un grupo de Whatsapp, allí entramos más en confianza y empezamos a planificar sobre las manadas que debemos alimentar y ayudar” rememoró, la estudiante de medicina veterinaria quien con la ayuda de su primo creó el logo de la Liga y abrió una cuenta de Instagram para dar a conocer la labor que realizan.
La Liga Animalista de San Diego, no solo está liderada por María Angélica Amanaú, pues la acompañan la profesora jubilada, Carmen López, la administradora jubilada, Carmen Viloria y el joven estudiante de ingeniera en telecomunicaciones y futbolista de la tercera división de San Diego, Cesar Franco, ellos han trabajado durante 10 años de forma anónima para proteger a todos los animales del municipio.
Todos se unieron a la Liga debido a la gran empatía que sienten hacia los “Ángeles peludos” (el apodo que les otorgó la señora Carmen Viloria) y a la vez para ayudar a quienes no pueden hablar.
Los protectores mantiene bajo su cuidado diario a 20 perros y 5 gatos, se encargan de alimentarlos, desparasitarlos, darles sus vitaminas y curarlos en caso de que presenten heridas por peleas o accidentes. También realizan jornadas de adopción que difunden a través de las redes sociales, sin embargo los miembros realizan una clasificación de adoptantes donde van descartando según su criterio: lo importante es si están aptos para poder encargarse de los animales.
“Para adoptar a un animal se le pide a los candidatos una serie de requisitos, y si son seleccionados se procede a programar una visita al lugar temporal donde se encuentra el animal para ver si se relacionan y si tienen conexión. Entonces agendan una cita de juegos en la casa de los candidatos”, explicó, la joven también auxiliar de veterinaria, quien especificó que para oficializar la adopción la familia deben enviar videos que garanticen que los animales están siendo cuidados en su nuevo hogar.
Los sueños de María Angélica Amanaú
Desde niña la joven estudiante de medicina veterinaria siempre soñó con abrir un refugio para todos los animales, y con este proyecto cuenta con el apoyo de su familia.
María Angélica Amanaú asegura que lo que la motivo a crear este proyecto fue la experiencia que tuvo al rescatar un perrito que bautizo como Gus.
Gus es un perrito salchicha discapacitado que lo tenía una familia desde cachorro pero como no querían cuidarlo lo dieron en adopción, sin embargo fue difícil encontrarle hogar porque un perrito con estas condiciones requiere cuidado mayores.
“Yo me comunique con ellos y esa misma noche del 27 de agosto me lo trajeron, pude percatarme de las condiciones reales del perrito, no solo estaba discapacitado sino que estaba casi famélico porque desde que dejo de caminar no podía controlar sus esfínteres y por esa razón lo dejaron en la cesta con tan solo una comida diaria” declaró Amanaú.
La familia de María Angélica y los miembros que conforma la Liga Animalista de San Diego se encargaron de realizar donativos para construirle una silla de ruedas. Gus, no solo recibió el cariño que necesitaba sino también las terapias de acupuntura y quiropraxia, las cuales son fundamentales para su recuperación, además aumento casi kilo y medio.
“Por las necesidades de Gusi, tenía que llevarlo a todas partes: a las clases, en el autobús y de compra, para cualquier lugar llevaba a mi gusanito” expresó María Angélica.
Con el tiempo Gus empezó a usar las piernas traseras por lo que corría más rápido. Al presenciar esta milagrosa recuperación los rescatistas se dieron cuenta que Gus era un perrito especial que tenía unas inmensas ganas de vivir.
La joven activista de los derechos de los animales confirmó que Gus tuvo su final feliz pues recientemente fue adoptado por una familia que lo acogió con todo el amor del mundo y se dedican a llevarlo sin falta a sus terapias de rehabilitación.
La Liga de Animalista de San Diego demostró que se puede abrir las puertas para encontrar la forma de vivir en armonía con los animales pero sobre todo para marcar la diferencia no solo dentro del municipio de San Diego sino en el mundo